Introducción
La triquinosis es una zoonosis transmitida por el consumo de alimentos contaminados por larvas de Trichinella spp. Es considerada la zoonosis de mayor incidencia en nuestra región y la mayoría de los casos provienen de alimentos derivados del cerdo (T. spiralis genotipo T1) sin controles bromatológicos.
Objetivos
Describir los aspectos epidemiológicos, clínicos, cambios electrocardiográficos y de biomarcadores de un brote de triquinosis.
Materiales y métodos
Estudio observacional, retrospectivo. Se analizaron pacientes con diagnóstico de triquinosis confirmado por serología (IFI y Western Blot) durante los meses de agosto y septiembre de 2016. Las variables se expresaron en proporciones y porcentajes. El nivel de significación se consideró p <0,05. El análisis de las variables cuantitativas se realizó por pruebas paramétricas y no paramétricas según la distribución. Las asociaciones entre variables categóricas se analizaron mediante el test de Fisher.
Resultados
Fueron confirmados 27 casos, la mediana de edad fue 39 años (12-61 años). Predomino de sexo masculino (17/27). Los 27 pacientes refirieron consumo de chorizo seco adquirido en comercios, distribuidos por una fuente en común . La mediana de inicio de síntomas fue de 18,5 días. Las manifestaciones clínicas correspondientes a la fase enteral y parenteral se observaron en un 33% y 67% de los casos, respectivamente. Los signos y síntomas más frecuentes en ambas fases fueron: mialgias (96,5%), fiebre (86%), edema bipalpebral (51%). El 48% de los pacientes consultó en otros centros; el 77% de estos recibió un diagnóstico diferente. Los hallazgos de laboratorio más relevantes fueron: leucocitosis (17/27) (mediana: 11,900/uL (4800-23,800 u/L), eosinófilos elevados en el 100% de los pacientes (mediana: 23,4% (5,9%-57,4%), CPK elevada (20/27) (mediana: 579 U/l (78-2975)). Se observaron cambios electrocardiográficos en 29,6% (8/27): trastornos de la repolarización (4/8), BCRD (3/8), taquicardia sinusal (1/8). Tres pacientes presentaron sintomatología cardiológica inespecífica (palpitaciones y náuseas) 2 de los cuales mostraron cambios en el ECG. En la fase de convalecencia 7/8 pacientes revirtieron los cambios en el ECG. Un paciente discontinuó seguimiento. Todos los pacientes recibieron tratamiento con AINES, 12/27 corticoterapia (metilprednisolona 1 mg/kg/día) y 18/27 tratamiento antihelmíntico. Se indicó tratamiento antiparasitario asociado a corticoterapia en 5/8 pacientes con alteraciones electrocardiográficas. No se registraron casos graves. No hubo asociación entre las variables estudiadas.
Conclusiones
En nuestra serie destacamos la eosinofilia en el 100% de los casos Los diagnósticos alternativos en visitas previas fueron frecuentes (77%). Las alteraciones electrocardiográficas, se observaron en un alto porcentaje (29,6%), aunque sólo 2 pacientes relataron sintomatología cardiológica. Destacamos que la sospecha de esta entidad debe basarse en el antecedente del consumo del alimento, la sintomatología clásica, el hallazgo de biomarcadores afectados y es de especial relevancia el monitoreo cardiaco con ECG basal y de control post tratamiento antihelmíntico.