Introducción
El COVID-19 implica grandes desafíos al sistema de salud, entre ellos el impacto en la resistencia a los antibióticos. Los pacientes hospitalizados con COVID-19 pueden adquirir
sobreinfecciones con bacterias multirresistentes, dificultando su manejo clínico. Las bacteriemias por Enterobacterales productoras de carbapenemasas (B-EPC), constituyen una de las infecciones más graves por sus escasas opciones terapéuticas. No se conocen en profundidad las consecuencias de las B-EPC en pacientes con COVID-19 (B-EPC-COVID-19).
Objetivos
Analizar las características microbiológicas y clínicas de las B-EPC-COVID-19 en pacientes hospitalizados, en comparación a B-EPC sin COVID-19.
Materiales y Métodos
Estudio observacional, retrospectivo y descriptivo. Desde 2020 a julio de 2021 se estudiaron todos los casos de B-EPC con/sin COVID-19 en pacientes hospitalizados. El diagnóstico de COVID-19 se realizó por RT-PCR o test de antígeno. Las bacterias se identificaron por MALDI-TOF. La sensibilidad antimicrobiana se determinó por Vitek2 o difusión en agar. El tipo de carbapenemasa se confirmó mediante PCR (KPC, NDM, VIM, IMP, OXA-48/163). Se relevaron características demográficas, comorbilidades y mortalidad de los pacientes, entre otras variables. Para el análisis estadístico se usó MedCalc 14.8.1 (considerando significativo p<0,05).
Resultados
Se detectaron 16 B-EPC-COVID-19 y 40 B-EPC. La edad mediana fue 61 (B-EPC-COVID-19) y 62 años (B-EPC) (p<0,05). En B-EPC-COVID-19, predominó el sexo masculino (88%, p= 0,0027). En ambos grupos, la especie predominante fue Klebsiella pneumoniae (75% en B-EPC-COVID-19 y 68% en B-EPC, p<0,05). Los tipos de carbapenemasa fueron (B-EPC-COVID-19/B-EPC): KPC (68%/87%), KPC + NDM (13%/0%), NDM (6%/10%), OXA-48/163 (0%/3%), no determinada (13%/0%). La mortalidad a los 30 días fue 69% para B-EPC-COVID-19 y 30% para B-EPC (OR 5,1; IC 95% 1,5-18,0; p= 0,0106).
Conclusiones
El principal microorganismo fue K. pneumoniae KPC. Emergen por primera vez en la institución Enterobacterales productoras de doble carbapenemasa, asociadas únicamente a los pacientes con COVID-19. La mortalidad por B-EPC-COVID-19 a los 30 días fue significativamente mayor que B-EPC. Un estudio previo realizado en nuestra institución, observó una mortalidad del 15% a los 30 días en pacientes hospitalizados por COVID-19. Estos resultados sugieren que las sobreinfecciones por B-EPC son un factor asociado a peor evolución clínica en pacientes con COVID-19.