Introducción:
La rápida detección e identificación de los patógenos responsables de las bacteriemias son fundamentales para un adecuado uso de antimicrobianos. En estudios previos se demostró que pueden asociarse a reducción de la mortalidad, costos y tiempos de internación. En la actualidad contamos con las siguientes técnicas rápidas de procesamiento (TRP) de hemocultivos (HC):
* Panel BCID del sistema Film Array®: detecta 24 microorganismos y 3 genes de resistencia a antibióticos (ATB)
* Vitek MS® para tipificación
* Vitek 2C® para sensibilidad
La utilidad de estas técnicas se ve favorecida cuando se asocian a programas de “stewardship” o de gestión de antimicrobianos, dado que optimizan su puesta en práctica en tiempos adecuados.
Objetivo:
Comparar el tiempo entre positividad del HC y ajuste del esquema ATB entre dos métodos de tipificación y antibiograma (método tradicional vs.TRP). Análisis del impacto de estas técnicas en la mortalidad, estadía hospitalaria y consumo de carbapenems.
Métodos:
Estudio unicéntrico de cohorte prospectiva, comparado con una cohorte histórica.
Se incluyeron pacientes hospitalizados con HC positivos procesados con TRP (casos), comparados con una cohorte histórica de pacientes con HC procesados con técnicas tradicionales (controles: cultivo en placa 24 h y luego procesamiento por Vitek y confirmación por técnicas de difusión).
Se incluyeron 130 casos entre enero/17 y enero/18, pareados cada uno con dos controles de la misma franja estacional del año previo. Se obtuvo un poder del 90% para detectar diferencia de 1 día en la duración de las internaciones, con una probabilidad de error tipo I del 5%. El análisis estadístico fue realizado mediante un análisis multivariable de tiempo al evento (tiempo al ajuste antibiótico) a través de una regresión de Cox.
Resultados:
Se incluyeron 130 casos y 260 controles. La edad promedio fue 67 años (r=19-97).
El 22% tenía inmunosupresión severa. El lugar de adquisición predominante fue el intrahospitalario (42%) y el 18% se encontraba en unidades críticas al momento de la toma del HC. Los gérmenes predominantes fueron las enterobacterias (54%), el 34% eran organismos multirresistentes, y la tasa de cultivos polimicrobianos fue del 8,2%. El 12,3% fueron contaminantes. El foco predominante fue el urinario (32,8%) seguido por el abdominal (22,8%).
No se encontraron diferencias significativas en cuanto a edad, sexo, grado de inmunosupresión, score de Charlson, Pitt, lugar de adquisición, sitio de internación, foco infeccioso, o germen implicado entre ambos grupos.
El tiempo promedio desde la positividad del hemocultivo hasta el ajuste del esquema
ATB empírico fue de 10,9 h (IQ 8.9-13.3) cuando se utilizaron las TRP, y de 36 h (IQ 25.7-53.4) con las técnicas convencionales (p <0.000). Esta diferencia también se observó en el subgrupo de pacientes que descalaron su tratamiento empírico con carbapenems (13,6 hs vs 51,1 hs p <0.0001), dato que podría inferir una disminución del consumo de carbapenems con las las TRP.
No se encontraron diferencias en cuanto al tipo de conducta tomada (desescalamiento, progresión, suspensión, mantenimiento del tratamiento ATB), ni en la mortalidad, o estadía hospitalaria entre ambos grupos.
La mortalidad sólo se asoció a un score de Pitt ≥ 5 ( p = 0,0004.). No se encontró relación entre mortalidad y grado de inmunosupresión, score de Charlson o presencia de patógenos multirresistentes.
Conclusiones:
Las técnicas de rápido procesamiento de hemocultivos permiten un tiempo de ajuste del esquema antimicrobiano empírico significativamente menor que las técnicas tradicionales. Aunque no se encontró impacto en la mortalidad o estadía hospitalaria, podrían resultar de utilidad para reducir el consumo de carbapenems.