INTRODUCCIÓN:
Las infecciones fúngicas en SNC son una entidad rara, con alta morbimortalidad, frecuente en personas con inmunocompromiso, como diabetes mal controlada, neoplasias, inmunodeficiencias, tratamientos con corticoides. Las presentaciones rinocerebrales son frecuentes y los agentes causales que suelen intervenir son del género mucorales, Aspergillus, Candida y sus formas combinadas. La coinfección con agentes mucorales y Aspergillus es extremadamente rara, sospecharla implica un desafío para la instauración precoz de su tratamiento.
CASO CLÍNICO:
Mujer de 68 años, con antecedente de HTA, obesa, hipotiroidea, DBT II insulino requirente, que curso internación reciente por neumonía por SARS-CoV 2, consulta por cuadro de 10 días de evolución de cefalea, diplopía, ptosis palpebral y proptosis ocular izquierda. Examen físico: Compromiso incompleto del III par izquierdo. Agudeza visual 4/10 OD y 3/10 OI, campos periféricos izquierdos disminuidos. Laboratorio: VES 57mm/Hora, PCR 13.6 mg/dl. RMI de cráneo con contraste: proceso infeccioso inflamatorio con compromiso pansinusal a predominio derecho con extensión endocraneana, compromiso de estructuras del seno cavernoso y de los músculos oculomotores izquierdo. Se inicia empíricamente tratamiento con ceftriaxona y vancomicina, con regular respuesta debiendo adicionarse metronidazol al séptimo día. Se toma muestra local que evidencia bola fúngica, con desarrollo en cultivo para hongos de Aspergillus y hallazgos en anatomía patológica de hifas compatibles con Mucormicosis. Se rota tratamiento a Anfotericina B liposomal. Presenta progresión clínico-imagenológica y fallece al día 43 de internación.
CONCLUSIÓN:
La asociación de aspergilosis y mucormicosis rinocerebrales se han descrito en neoplasias hematológicas, neutropenias graves y en COVID-19 moderado-severo, siendo predictoras de mal pronóstico por sus múltiples complicaciones (trombosis del seno cavernoso, infección diseminada, osteomielitis y muerte). El estándar de oro en el diagnóstico de las infecciones fúngicas sigue siendo los estudios microbiológicos e histológicos. El tratamiento médico y quirúrgico es indicativo y fundamental. En la mucormicosis es de elección el abordaje quirúrgico temprano y antifúngico de forma sistémica siendo la anfotericina B liposomal de primera línea, debido a la resistencia natural de los mucorales a Voriconazol. Sospechar la coinfecciones con mucorales es importante para poder lograr su tratamiento temprano y oportuno.