Introducción:
El tratamiento de la cromoblastomicosis implica un desafío, por la falta de respuesta en algunos casos y la recidiva en otros, especialmente en las formas extensas y de larga evolución. Se presenta el caso clínico de un paciente con cromoblastomicosis recidivada, con buena evolución tras una estrategia terapéutica combinada.
Descripción del Caso/Casos:
Varón de 51 años, trabajador rural, oriundo de Paraguay. Inició hace 30 años con una tumoración verrugosa en rodilla derecha, por lo que cursó internación en nuestro hospital en 2011, con diagnóstico de cromoblastomicosis y rescate de Fonsecaea pedrosoi. Realizó tratamiento antimicótico por 7 meses, con posterior abandono del mismo, presentando en su último control involución casi total de las lesiones. Consulta 10 años después, por presentar lesión de similares características en la misma localización, con aumento del tamaño progresivo en los últimos tres años. Al examen fisico, presentaba en rodilla derecha con extensión a fosa poplitea, tumoración exofítica, de tonalidad pardo-grisácea y de aspecto verrugoso, sembrada por puntos negros, alternando con cicatrices atroficas correspondientes a lesiones previas. Si bien nuestra primera presunción diagnóstica fue la de una recidiva de cromoblastomicosis, por la cronicidad de la infección y por el proceso cicatrizal secundario a la involución, pensamos también en úlcera de Marjolin. Se realizó biopsia de la lesión para cultivo micológico con rescate de Fonsecaea spp. En la histopatología: epidermis con hiperparaqueratosis, acúmulos de neutrófilos en capa córnea, hipergranulosis e hiperplasia epitelial; dermis superficial con presencia de microabscesos papilares. A nivel de la capa córnea múltiples cuerpos fumagoides. Se realizó tratamiento simultáneo combinado con Itraconazol 400 mg/ día + Terbinafina 500 mg/ día, asociado a resección quirúrgica parcial de la lesión. Evolucionó favorablemente, con reepitelización ad integrum en sitio quirúrgico y regresión de las demás lesiones, pese a lo cual continuará hasta completar 12 meses.
Discusión:
Dado el carácter recidivante de esta patología, cabe resaltar la importancia de completar el tratamiento médico por 12 a 18 meses, destacar la asociación terapéutica de antimicóticos por su efecto sinérgico, así como el tratamiento quirúrgico en un paciente con lesiones extensas.