INTRODUCCIÓN:

La vacunación es una de las estrategias de salud pública más importante en la prevención de enfermedades infecciosas, sin embargo, la vacunación del adulto no recibe la misma atención ni tiene una demanda asistencial similar a la observada en la población pediátrica. Varios reportes muestran que la cobertura vacunal en la población general adulta de argentina es baja.

OBJETIVO:

Determinar la prevalencia de vacunación completa según el calendario de vacunación vigente en una población adulta argentina internada en un hospital general de agudos.

MATERIALES Y MÉTODOS:

Estudio descriptivo, de corte transversal. Se incluyeron a pacientes adultos internados en un servicio de clínica médica entre noviembre de 2016 y mayo de 2017. Se realizó una encuesta sobre sus antecedentes de vacunación. Se evaluó el estado de inmunización según las recomendaciones nacionales de vacunación vigentes. La información fue procesada en Epi-InfoTM versión 7.2. Las variables categóricas se presentaron con medidas de frecuencia absoluta y relativa (%) y las variables continuas, con mediana y rango intercuartílico (RIC).

RESULTADOS:

Se incluyeron 366 pacientes con una mediana de edad de 58 años (RIC: 26). 59% correspondían al sexo masculino. El 34% y el 57.7% presentó alguna comorbilidad inmunosupresora y no inmunosupresora, respectivamente.
Del total de pacientes estudiados, 19 (5%; IC95% 3,4-8) tenían el calendario de vacunación completo. Al estratificar por rango de edades, esto ocurría en el 0,2, 5,5 y el 33,3% de los grupos >65, 25-64 y 18-24 años respectivamente. Al valorar coberturas específicas, se observó que, de todos los casos, 39 (10.7%) tuvo vacunación completa de hepatitis B y 90 (24,6%) recibió doble bacteriana. Al comparar las coberturas de los 277 pacientes que tenían indicación conjunta de vacunas antigripal (AG) y antineumocócica (VN), estas fueron de 47% y 25,6% respectivamente (p<0.001).
El 76,5% de los pacientes tuvo algún contacto con el sistema de salud en los 2 años previos. De estos, solo el 29% refirió haber recibido alguna indicación de vacunación.

DISCUSIÓN:

La prevalencia de vacunación global fue baja. La población mayor a 65 años fue la más desprotegida con una tasa de cobertura menor al 1%. Estos datos ponen en evidencia la necesidad de reevaluar y reforzar la indicación de inmunización en la población de adultos mayores de referencia.
Con respecto a las vacunas AG y VN, aunque presenten indicaciones similares, se vio un mayor porcentaje de vacunados con AG. Se cree que esta diferencia podría estar sujeta al ya reportado impacto de los medios masivos de comunicación en contribuir a la utilización de los servicios de salud y a la adherencia de la población a la vacunación antigripal.
Finalmente, la indicación de vacunas por los profesionales de la salud fue baja a pesar de que más de la mitad de los sujetos encuestados refirió un contacto con el sistema de salud en los 2 años previos.

CONCLUSIÓN:

A pesar de contar con un amplio calendario de vacunación y posibilidad de acceso al sistema de salud, un alto porcentaje de los adultos presentaron un esquema de vacunación incompleto. Es importante recordar que todo contacto con el sistema de salud es una oportunidad para actualizar las vacunas, siendo el ámbito de internación una excelente oportunidad.