Introducción:
La enfermedad de Chagas (ECh) afecta a 8-10 millones de personas en todo el mundo. En nuestro país hay 98.000 personas afectadas, siendo la zona norte la más endémica. A fines del siglo XX se logró una interrupción significativa de la transmisión vectorial. Desde el 2008 los hemoderivados son cribados universalmente y desde 2014 se ha implementado la serología de ECh en todas las mujeres embarazadas, centrando los esfuerzos en la prevención de la transmisión vertical, la forma de contagio más importante en la actualidad.
Objetivos:
Describir la presentación demográfica y clínica, así como el tratamiento de los pacientes con ECh en un centro especializado en Infectología.
Materiales y Métodos:
Estudio descriptivo, observacional, retrospectivo, de pacientes con ECh referido a nuestro centro entre enero de 2009 y marzo de 2023. Se analizaron variables demográficas y clínicas: probable mecanismo de transmisión, motivo de la prueba, clasificación al ingreso, pruebas de laboratorio diagnósticas, tratamiento y reacciones adversas reportadas a medicamentos (RAM). Los datos se obtuvieron de las fichas clínicas de los pacientes previa autorización el comité de ética.
Resultados:
Se diagnosticó infección por T. cruzi en 234 pacientes, 74% mujeres. La mediana de edad fue de 47 años. 70% nacionalidad chilena, la mayoría viviendo en la Región Metropolitana. Entre los extranjeros, la mayoría eran bolivianos. El 76% no tenía comorbilidad asociada. La donación de sangre fue la principal forma de detección de ECh (42 %), seguida del embarazo. La transmisión vectorial se estimó en el 50% de los casos. 84% se clasificó al ingreso como enfermedad crónica indeterminada; 42% de los pacientes recibieron tratamiento, con nifurtimox; el 60% presentó RAM, con mayor frecuencia las dos primeras semanas de inicio del tratamiento. La mayoría de las RAM fueron gastrointestinales. La severidad de las RAM generó interrupción del tratamiento en el 20% de los casos. Edad y el sexo no se asociaron con una mayor tasa de RAM.
Discusión / Conclusiones:
La ECh continúa siendo endémica en nuestro país. La detección en donantes de sangre y mujeres embarazadas son los principales mecanismos de diagnóstico. La importancia de su detección en el embarazo es tanto la prevención de la transmisión vertical como la oportunidad de un tratamiento curativo temprano. La incidencia de RAM es inferior a la descrita en otras series.