Introducción
La incidencia de la enfermedad invasiva por EGA (iSGA) en entornos de altos recursos oscila entre 1,5 y 3,5 casos por cada 100.000 personas. Las formas de presentación son: miositis/fascitis necrotizante, sepsis o septicemia, meningoencefalitis, neumonía, artritis séptica, síndrome del shock tóxico estreptocócico (SSTS), fiebre puerperal, endocarditis. La tasa de mortalidad sigue siendo mayor al 50%. A nivel mundial, en los últimos años, la OMS ha emitido alertas, reportando un aumento en el número de casos de iSGA.
El objetivo de nuestro estudio fue describir la epidemiología y las características clínicas de la iSGA en pacientes adultos en un hospital descentralizado de la Region de Cuyo.
Materiales y métodos
Estudio descriptivo y retrospectivo se analizaron las muestras positivas para S. pyogenes de nuestro hospital desde enero del 2020 a diciembre del 2023. Se estudiaron los pacientes que presentaron enfermedad invasiva y los datos se plasmaron en una planilla de Excel.
Resultados
Se incluyó en el análisis 56 casos de iGAS durante el periodo de estudio.
Se obtuvo un 61,8% de invasividad. El 60,7% correspondió a sexo masculino con una media de edad de 40,6 años, la edad media en mujeres fue de 45,1 años. El factor predisponente más frecuente (55%) fue disrupción de la integridad cutánea y la presentación clínica más frecuente fue fascitis necrotizante e infección osteoarticular.
El 28,5% requirieron ingreso a STIA en 2023. La mortalidad global fue del 12,5% (7), destacando que el 71,4% de las muertes ocurrieron en los últimos 4 meses.
Conclusiones
Comparado con otras series no hubo diferencias en cuanto al comportamiento clínico y tasas de mortalidad. Encontramos diferencias en: edad de presentación,sitio donde se aisló el germen y estacionalidad de la infección.
Creemos que el aumento de casos en el último cuatrimestre puede deberse a una mayor sensibilización del sistema de salud y a que los clones circulantes son epidémicos exitosos y se consideran intrínsecamente virulentos.
Resulta fundamental seguir monitoreando la situación epidemiológica para comprender la dinámica de los linajes y estar preparados para posibles cambios en su prevalencia.