Introducción:
El uso inapropiado de antimicrobianos está asociado a eventos adversos en pacientes hospitalizados y a la emergencia de organismos multirresistentes (OMR). La implementación de PROA demostró reducir estos eventos y disminuir los costos de atención.
Objetivo:
Evaluar un PROA a través de la prevalencia y lo racional del uso de antimicrobianos. Determinar la incidencia de infecciones por OMR en el mismo periodo.
Métodos:
Se evaluó la prevalencia del uso de antibióticos, definido como número de pacientes que recibieron antibióticos sobre el total de pacientes evaluados durante auditorias semanales entre 2015 y 2018. El PROA realizó auditoría prospectiva con feedback de resultados, actualizaciones de guías de tratamiento e intervenciones educativas. Se consideraron inadecuados a los tratamientos que no se ajustaban a las guías institucionales. Se describe incidencia de OMR (número de aislamientos de OMR cada 1000 días paciente): enterobacterias productoras de carbapenemasas (EPC), Staphylococcus aureus meticilino resistente (SAMR) y Pseudomonas aeruginosa resistente a carbapenem (PAE-CR). Para evaluar los efectos longitudinales de las intervenciones del PROA y la evolución en la incidencia de OMR se realizó una regresión de Poisson.
Resultados:
Durante el período de estudio se evaluaron 15.056 indicaciones de las cuales 7105 tenían prescripción de antibióticos, con una prevalencia global del 47.19%. El tipo de indicación fue: empírico en 3658 (51.48%), documentado en 2395 (33.71%) y profilaxis 1036 (14.58%). Resultaron inadecuadas 763 (10.7%) indicaciones. Las causas de tratamiento inadecuado fueron: espectro 370 (48.65%), duración 103 (13.48%), profilaxis 179 (23.48%), dosis 30 (3.97%) y no indicación 72 (9.48%).
La prevalencia de uso de antibióticos disminuyó a lo largo del período estudiado (IRR 0.994, IC95% 0.993-0.996, p<0.001), al igual que las indicaciones inadecuadas (IRR 0.986, IC 95% 0.980-0.992, p<0.001).
En cuanto a incidencia de OMR, se observó un aumento de la densidad de incidencia de EPC en el mismo período (IRR 1.106, IC95% 1.065-1.150, p<0.001), sin cambios en PAE CR (IRR 0.969, IC95% 0.902-1.039, p=0.37) y SAMR (IRR 1.017, IC95% 0.863-1.199, p=0.81).
Conclusiones:
El desarrollo del PROA permitió una reducción en la prevalencia de uso de antibióticos y en su utilización inadecuada. Si bien la incidencia de EPC continuó en aumento, esto podría deberse a causas relacionadas a fallas en nuestros sistemas de prevención ó a factores epidemiológicos ajenos a la institución. Debemos continuar trabajando ideando nuevas estrategias que nos permitan seguir optimizando el uso de los antibióticos como la aplicación de tratamientos cortos y ultracortos aún en infecciones severas.