Introducción:
Argentina adhirió a los objetivos 90/90/90 de ONUSIDA a fin de eliminar el VIH como un problema de salud pública en 2030. Además, la Ciudad de Buenos Aires adhirió a la iniciativa Fast Track Cities de IAPAC. Sin embargo, importantes brechas persisten. La atención primaria en la ciudad representa una puerta de entrada importante para nuevos diagnósticos y tiene un gran potencial para aumentar los indicadores de personas en tratamiento y supresión viral.
Métodos:
Se describe la implementación de un proyecto piloto de provisión de tratamiento antirretroviral en atención primaria. Después de 6 meses de capacitación del equipo (en el que participaron médicos clínicos, generalistas, farmacéuticos y enfermeros) y de haber establecido los circuitos de laboratorio, farmacia, notificación epidemiológica y los criterios de referencia a Infectología se comenzaron a atender a las personas VIH positivas diagnosticadas en el centro de salud siguiendo un protocolo de atención simplificado diseñado en conjunto entre los docentes y el personal participante, unificando el proceso de diagnóstico y tratamiento en el centro de salud (Ce.S.A.C. Nº 33). Se establecieron los indicadores de monitoreo (porcentaje de personas bajo tratamiento y supresión viral). Se excluyeron de estos indicadores a los pacientes fallecidos y transferidos a otro centro por cobertura social o cambio de domicilio.
Resultados:
Desde agosto de 2017 a marzo 2019 se registraron 43 nuevos pacientes con VIH. El 79 % eran hombres, con una mediana de edad de 30 años. La mediana de CD4 fue 462 (rango 170-1.552) y de carga viral 36.158, (151-395.496). Todos comenzaron tratamiento en una mediana de 7 días de la primera consulta, limitándose a dos esquemas predeterminados, 42 con Darunavir/Ritonavir. TDF, FTC y 1 con EFV, TDF, FTC. Del total, 2 pacientes fallecieron, 8 se transfirieron y 0 se perdieron de seguimiento.
En total el 100 % se encuentra en tratamiento, y 99 % se encuentra indetectable con menos de 40 copias por ml.
Además, debido al conocimiento de la comunidad, algunos pacientes atendidos en otros centros solicitaron seguir su atención en el Ce.S.A.C. 33, por lo que se decidió incorporarlos si podían recibir los esquemas disponibles en el proyecto. En total 29 pacientes pre tratados continuaron su atención, 25 con DRV/r TDF-3tc y 4 con EFV, TDF, FTC. De estos, no falleció ningún paciente, al inicio 20 % se encontraba con carga detectable. Durante el seguimiento 0 se transfirieron y 1 se perdió. Actualmente, el 100 % se encuentra en tratamiento y 99 % se encuentra con carga viral indetectable (menos de 40 copias).
Conclusiones:
El diagnóstico y el TARV en el primer nivel de atención es factible con los recursos existentes en atención primaria de la Ciudad. La expansión de esta intervención a otros CeSACs tiene un alto potencial de mejorar los indicadores de la Ciudad. Es necesario incorporar los cálculos automatizados de la cascada en los sistemas de seguimiento (SISA y SIGHEOS) a fin de simplificar el trabajo de los equipos.