Introducción: 

El consenso general ubica a la higiene de manos como la medida fundamental para la reducción de la incidencia de las IACS en los pacientes hospitalizados, y en consecuencia, la mejor arma contra la resistencia antimicrobiana. Conforme a la propuesta de la OMS, se desarrolló el presente trabajo en cinco frentes simultáneos y de forma interdisciplinaria.

Objetivos: 

Implementar acciones para la mejora de la adherencia a la higiene de manos. Medir la adherencia a la higiene de manos en el personal de salud

Materiales y Métodos: 

Se implementaron medidas siguiendo las recomendaciones de la OMS, y se realizó mediciones con los instrumentos y herramientas provistos por el Programa Vihda.

Resultados: 

Cambio del sistema: cada unidad de internación tiene garantizado el acceso al jabón líquido y toallas descartables, o a la solución de base alcohólica. Al igual que los consultorios externos, y en los accesos para el público en general. Formación: Programa anual de capacitaciones sobre lavado de manos instaurado, además de formación de 6 referentes-observadores y talleres para personal de reciente ingreso y estudiantes. 48 (30%) personas capacitadas Evaluación y retro-alimentación: Se participó en dos ediciones consecutivas del estudio de prevalencia del Programa Vihda, y los resultados son socializados en 3 encuentros presenciales con todo el equipo de salud. En mayo de 2023 se midió una adherencia promedio del 21,14% con un mínimo 11% en el servicio de guardia, y máximo de 33% en la UTI. Mientras el porcentaje de técnica correcta fue en promedio 45,8%, con un mínimo del 27% en sala de cirugía, y un máximo de 63,6% en UTI. Recordatorios en el lugar de trabajo: 73 carteles lavables en cada ingreso a unidad o habitación, sobre los 5 momentos y la técnica correcta de la higiene de manos en cada punto de atención. Para el público en general se proyectan videos en las pantallas de pasillos y salas de espera. Para el 5 de mayo y en cada fecha conmemorativa, se montó un estand para repartir folletos y enseñar a realizar la técnica correcta de la higiene de manos. Clima institucional de seguridad: la higiene de manos se encuentra normatizada y periódicamente se envían circulares a modo de recordatorio sobre la necesidad de aumentar la adherencia. Cada servicio, expone un acta de compromiso, firmada por todos los miembros del equipo, para la mejora de la adherencia. Desde la institución, se lleva adelante un programa de certificación y reconocimiento para cada servicio que logre mejorar en un 50% sus propios indicadores de adherencia.

Discusión / Conclusiones: 

La estrategia multimodal de la OMS ayudó a sentar las bases institucionales para el trabajo permanente para la mejora de la adherencia del lavado de manos y para la medición y el control permanente de los indicadores relacionados.