Introducción:
El esquema de vacunación estándar contra HBV induce títulos de anticuerpos protectores en el 90% de los adultos vacunados. En general, no se necesitan dosis de “boosteo” para individuos inmunocompetentes completamente vacunados. Sin embargo, reportamos un caso de un paciente con hepatitis B aguda, con antecedente de vacunación completa que presentó anticuerpos anti-HBs a títulos protectores 10 meses antes.
Resumen clínico, exámenes complementarios y discusión: Paciente de 37 años, sin antecedentes de relevancia, que recibió vacunación para HBV en 1998, con títulos antiHBs de 10 U/L realizados en abril 2016, consulta en febrero 2017 por ictericia, sin fiebre ni dolor abdominal ni otros síntomas gastrointestinales.
Laboratorio:
(24/2/17) BT 10, BD 8.4, GOT 995, GPT 2397, FAL 142, TP 70.6, KPTT 30, ELISA HIV no reactivo, HBsAg >124925.00, HBc IgG 6.86, antiHBs 0.00, HAV IgG 13.00, HAV IgM 0.56, HCV 0.07, VDRL no reactivo, EBV IgG 2.95
(3/3/17) BT 12.6, BD 11, GOT 1479, GPT 1917, FAL 179
(6/3/17) HBc IgM 22.97, antiHBs 0.00, HBeAg 636.76, antiHBe 33.06, BT 16.9, BD 14.6, GOT 1880, GPT 2332, FAL 180
(09/03/17) BT 18.9, BD 16.4, GOT, 2294, GPT 2689, FAL 185
(16/03/17) BT 8.6, BD 6.9, GOT 307, GPT 716, FAL 126, HBeAg 7.10, antiHBe 1.27
Evoluciona favorablemente con pico de transaminasas a los 15 días del comienzo del cuadro, y posterior descenso de los parámetros de hepatitis aguda. Continúa seguimiento de evolución con mediciones seriadas de HBeAg y antiHBe.
Conclusiones:
Existe evidencia de un desgaste de la inmunidad con el tiempo luego de la vacunación para hepatitis B. En un estudio de seguimiento de pacientes que recibieron la vacuna contra hepatitis B al momento del nacimiento, se determinó a los 15 años que el 8% tenía evidencia de infección pasada por HBV, con anti-HBc positivo, pero ninguno tenía infección crónica por HBV. A pesar de la probable disminución posterior y la pérdida final de anti-HBs detectable, está establecido que un curso completo de vacuna contra hepatitis B confiere protección completa contra la enfermedad clínica aguda y la infección crónica por hepatitis B por largos periodos de tiempo. De hecho, los linfocitos T y B, cuya capacidad de respuesta predomina sobre la presencia de anticuerpos anti-HBs en suero, son los verdaderos marcadores de inmunidad. Se necesitan más estudios sobre la duración a largo plazo de los anticuerpos a títulos protectores en individuos vacunados con esquema completo. Por otro lado, es necesario replantearse la necesidad de medir los anticuerpos anti-HBs de rutina, no solo en personal de salud, si no también en aquellos individuos que se encuentran en alto riesgo de contagio por tener exposiciones repetidas.