Introducción
La emergencia de cepas multi y pan-resistentes y su diseminación en el medio hospitalario hace difícil encontrar opciones terapéuticas válidas y además tiene impacto en los costos, en la estadía hospitalaria e incluso en algunos casos en la mortalidad.
La detección a partir de muestras clínicas de cepas de S.aureus meticilino resistente (MRSA), de bacilos gram negativos productores de beta lactamasa de espectro extendido (ESBL) o de carbapenemasas (CABSA) o de enterococos con resistencia a vancomicina (VRE) es solo la punta del iceberg con respecto al total de pacientes colonizados que potencialmente pueden diseminar estas cepas.
Los medios de cultivos cromogénicos han simplificado la detección de las mismas a partir del cultivo de vigilancia de diversas muestras de hisopados (rectales, nasales, inguinales, axilares).
Objetivo
Determinar la utilidad del enriquecimiento en caldo incubado durante 24 h previo a la siembra en medios cromogénicos para la búsqueda de MRSA, VRE y CABSA a partir de cultivos de vigilancia de hisopados rectales, nasales, inguinales, axilares.
Materiales y Métodos
Se estudiaron 2805 hisopados rectales de los cuales 592 fueron sembrados para EVR y 2213 para CABSA; también se analizaron 100 hisopados nasales, 39 axilares y 20 inguinales para la búsqueda de MRSA. Todas las muestras se sembraron en caldo de BHI que se incubó a 37° C durante 24 h y luego se subcultivo a medios cromogénicos (SC). En el caso de los hisopados nasales, axilares e inguinales estos medios correspondieron a MRSA (Medicatec) y en el caso de los rectales a EVR (Medicatec) y CABSA (Medicatec). Todas las muestras fueron sembradas además en forma directa en su correspondiente medio cromogénico (CRD).
Resultados
Del total de hisopados rectales para búsqueda de EVR, 493 (66,3 %)fueron negativos, 105 (17, 7 %) fueron positivos en la siembra directa en CRD y 94 (15,9 %) solo a partir de SC (p:0,39). Con respecto a la búsqueda de CABSA a partir de esta muestra, 2110 (75,2 %) fueron negativas, 409 (14,6 %) fueron positivas en la siembra directa en CRD y 286 (10,1 %) solo a partir de SC (p <0,05)
Finalmente en la búsqueda de MRSA a partir de hisopados nasales, axilares e inguinales, 130 (81,7 %) muestras dieron cultivo negativo, 18 (11,3 %) fueron positivas en CRD y 11 (6,9 %) solo a partir de SC (p:0,16)
Conclusiones
Si bien el enriquecimiento en caldo incrementó la detección de MRSA, EVR y CABSA, la diferencia con respecto a la siembra directa solo fue significativa con respeto a este último tipo de microorganismos.
La mortalidad asociada a las bacteriemias por cepas productoras de carbapenemasa se encuentra en el orden del 25-60 % y alrededor de 60 % de los pacientes colonizados evoluciona a una infección por lo tanto la optimización en la detección de las mismas a partir de cultivos de vigilancia es clínicamente relevante.
Posiblemente se alcance una diferencia significativa en la búsqueda de EVR y de MRSA con un número mayor de muestras.