Introducción
La coinfección (CI) y sobreinfección (SI) bacteriana representa una seria amenaza para los pacientes hospitalizados por COVID-19, aumentando su morbimortalidad.
Objetivos
Conocer la incidencia de la CI/SI en pacientes ingresados por COVID-19 a nuestra institución, analizar características demográficas, microbiológicas y mecanismos de resistencia antimicrobiana, como herramienta para orientar el tratamiento empírico y garantizar el uso responsable de antibióticos.
Materiales y métodos
Estudio retrospectivo observacional de todos los pacientes internados por COVID-19 e infección bacteriana (IB) entre el 1 de abril de 2020 y el 30 de abril de 2021.
Resultados
Ingresaron a nuestro hospital 338 pacientes con diagnóstico de COVID-19 que fueron confirmados por PCR (227), test rápido de antígeno (81) o de manera retrospectiva por detección de anticuerpos IgG e IgM anti SARS-CoV-2 con nexo epidemiológico y tomografía compatible (20). Se documentó IB en 31 (9,17%) pacientes con edad media de 76,1 años (rango: 52-91) de los cuales 61,3% eran mujeres. Se registraron 35 procesos infecciosos: 27 (77,1%) SI y 8 (22,9%) CI. Sólo en 2 pacientes se observaron dos o más procesos. Prevalecieron las infecciones del tracto urinario (22/35) seguidas de las bacteriemias (6/35) y se procesó sólo una muestra de infección respiratoria.
Se aislaron 54 microorganismos (MO), predominando los bacilos gram negativo (63%). Los patógenos más frecuentes fueron: Enterobacterales (EB) (51.8%), Enterococcus spp. (24.1%) y P. aeruginosa (7.4%). EB presentaron 57.1% de sensibilidad a amikacina, 28.6% a trimetoprima sulfametoxazol y 25% a ciprofloxacina. El 35.7% de EB fueron productores de beta-lactamasa de espectro extendido (BLEE) y entre ellos, una cepa fue resistente a colistín. La resistencia a carbapenems por producción de carbapenemasa fue del 17.9%, de tipo KPC y sólo se observó en cepas de K.pneumoniae. En Enterococcus spp. se detectó 23.1% de resistencia a vancomicina, 61.5% a ampicilina y 46.1% a ciprofloxacina.
Conclusión
La existencia de CI en nuestra población fue relativamente baja. La microbiología de las SI está estrechamente relacionada con MO hospitalarios. Dado al bajo número de procesos infecciosos involucrados en nuestro estudio resulta difícil inferir sobre la utilidad de un tratamiento antibiótico empírico en pacientes con COVID-19 como así también orientar sobre la epidemiología local.