Introducción:

El aumento de la expectativa de vida de la población general, el uso de drogas para la disfunción eréctil y la falta de uso habitual de medidas de barrera podría correlacionarse con el aumento de infecciones de transmisión sexual (ITS) en personas mayores a 50 años. Si bien se ha demostrado el aumento de las ITS a nivel global y a nivel nacional, hay escasos datos de la incidencia de las mismas en este subgrupo poblacional.

Objetivos:

Describir la prevalencia de casos de ITS y las características sociodemográficas y clínicas de las personas mayores de 50 años atendidas en un servicio de infectología referente de VIH de un Hospital General de Agudos de CABA.

Materiales y métodos:

Estudio descriptivo corte transversal. Se recabaron los datos registrados en la historia clínica electrónica de la primera consulta de ITS de personas mayores a 50 años en el periodo 2017-2018.
Se consideraron para el análisis las siguientes ITS: sífilis, uretritis, proctitis y VIH. Se evaluaron las historias clínicas que presentaban al menos una consulta de seguimiento a los 6 meses para infección por VIH y sífilis.
Los datos fueron analizados mediante Epi-InfoTM versión: 7.2.

Resultados:

De un total de 1389 casos de ITS durante el periodo de estudio, 148 (10,7%) correspondieron a pacientes mayores de 50 años. En este subgrupo, la media de edad fue de 56 años (RIC: 53-61) y el 80,9% fue de género masculino. En 52 casos tenían antecedente de infección por VIH. Las ITS diagnosticadas fueron: 79 sífilis, 55 nuevos diagnósticos de VIH, 13 uretritis y 1 proctitis.
De los 79 casos de sífilis, 50 tuvieron tratamiento completo y control a los 6 meses siendo 34/50 (68%) pacientes VIH positivos y adherentes al tratamiento antirretroviral (TARV) con carga viral indetectable al momento del diagnóstico de la sífilis.
Se diagnosticaron 55 nuevos casos de VIH. De estos, 47 pacientes (85,5%) iniciaron TARV, logrando indetectabilidad el 95,7%, los 8 pacientes restantes no volvieron a la consulta a pesar del llamado activo.
Hubo 13 casos de uretritis, de estos, 12 realizaron tratamiento y se documentó adecuada respuesta clínica en 10, los 3 restantes no tuvieron seguimiento en nuestro servicio. Finalmente, se diagnosticó y trató 1 caso de proctitis.

Conclusión:

El presente trabajo describe una prevalencia de ITS en población adulta que debe considerarse para fomentar la prevención y detección precoz de las ITS como parte del abordaje integral de esta subpoblación. Se vio que aquellos que tenían antecedente de VIH y seguimiento activo en el servicio registraron una mayor tasa de seguimiento comparada con la población VIH negativa. A su vez los nuevos diagnósticos de VIH presentaron un alto porcentaje de inicio de TARV y respuesta virológica. Sería necesario implementar medidas que faciliten el acceso al seguimiento posterior, particularmente en pacientes VIH negativos.