Introducción:
Tradicionalmente, las bacteriemias han sido tratadas mediante cursos prolongados de antimicrobianos (ATB) administrados por vía intravenosa (IV). No obstante, los ATB orales (VO) podrían considerarse como una alternativa viable para completar el tratamiento.
Objetivos:
conocer los patrones de prescripción de ATB VO para bacteriemias por bacilos gram negativos (BGN) y cocos gram positivos (CGP) en Argentina.
Materiales y Métodos:
Encuesta dirigida a médicos con capacidad de prescribir ATB para pacientes adultos hospitalizados en Argentina realizada durante el mes de junio del 2023. La encuesta indagaba sobre el uso de ATB VO en dos escenarios clínicos: bacteriemia por Escherichia coli y por Streptococcus del grupo B con estabilidad hemodinámica, susceptibilidad a ATB VO, control del foco y adecuada absorción gastrointestinal. Se indagó también la prescripción de ATB VO para otras bacterias, mecanismos de resistencia y focos de infección. La encuesta fue realizada mediante Google Forms y distribuida mediante redes sociales.
Resultados:
Un total de 163 médicos respondieron la encuesta. Edad (mediana): 41 años (RIC 35-47). Sexo femenino: 59%. Especialidades médicas más frecuentes: infectología (50%), medicina interna (29%), cuidados intensivos (10%). Procedencia: Ciudad de Buenos Aires (54%); Buenos Aires (20%), resto del país (26%). El 73% utilizaría un ATB VO para completar el tratamiento de bacteriemias por BGN; 64% en bacteriemias por CGP; 20% en ningún caso. Con respecto a las bacteriemias por BGN, el 77% haría la transición a VO entre el 3er y 5to día de ATB IV. ATB VO más seleccionados: fluoroquinolonas (87%), betalactámicos (71%) y TMS (62%). Duración total de tratamiento: <=7 días (41%), 8-10 días (43%) y >=11 días (16%). El 91% utilizaría ATB VO para otros BGN: enterobacterias (91%), Pseudomonas spp (66%), enterobacterias BLEE (45%), Acinetobacter spp (29%) y enterobacterias productoras de carbapenemasas (20%). De acuerdo con el foco, el 76% utilizaría ATB VO para foco abdominal y 56% para bacteriemia asociada a catéter central, mientras que solo el 31% y 22% lo utilizaría para endocarditis o foco abdominal con colección no drenada. Con respecto a las bacteriemias por CGP, los ATB VO más seleccionados fueron: betalactámicos (92%), linezolid (45%) y TMS (40%). El 88% utilizaría ATB VO para otros CGP: otros estreptococos beta hemolíticos (91%), Staphylococcus coagulasa negativo (84%), Enterococcus vancomicina sensible (67%), S. aureus (64%) y Enterococcus vancomicina resistente (32%). Según el foco, 83% utilizaría ATB VO para celulitis sin absceso, 75% con absceso drenado y 77% para neumonía, mientras que solo el 35% para endocarditis.
Discusión / Conclusiones:
La mayoría de los encuestados utilizaría ATB VO para completar el tratamiento de bacteriemias. El conocimiento sobre los hábitos de prescripción de ATB VO para el tratamiento de bacteriemias brinda la oportunidad de implementar estrategias educativas que fomenten el uso adecuado de antimicrobianos.