Introducción:
La endocarditis infecciosa es una patología 4,6 veces más frecuente en adultos mayores que en la población general. En este grupo etario muchas veces se presenta como infección asociada los cuidados de salud, y presenta dificultades diagnósticas adicionales debido a la variedad de presentaciones clínicas, desde fiebre sin foco hasta sepsis severa.
Objetivo:
Describir características clínicas y epidemiológicas en una muestra de pacientes adultos mayores con endocarditis infecciosa (EI) en una Institución de tercer nivel.
Materiales y Métodos:
Estudio observacional y prospectivo. Se incluyeron 50 pacientes asistidos durante el periodo 2009-2016 con diagnóstico de endocarditis infecciosa (según Criterios de Duke modificados) en una Institución de tercer nivel, mediante fichas prediseñadas de diagnóstico y evolución clínica.
Resultados:
Se incluyeron 50 pacientes, 58% femeninos y 42% masculinos, con una edad media de 73 años. Un 86% de las EI presentaron un evento predisponente. El 98% de los pacientes presentaron fiebre como parte del cuadro clínico. El tiempo desde el comienzo de los síntomas hasta el diagnostico fue menor a 7 días en un 54% de los casos. En un 24% de los casos no se pudo identificar agente etiológico. El 76% de los casos presentó hemocultivos positivos, de los cuales un 82% correspondieron a cocos gram positivos, cultivándose Staphylococcus aureus sensible a meticilina en un 32,2%, Staphylococcus aureus resistente a meticilina en 22,5%, Streptococcus spp. en 19,3%, Staphylococcus coagulasa negativo en 12,9% y Enterococcus en 12,9% . En un 13% se obtuvieron bacilos gram negativos, en su mayoría Escherichia coli, y en 5% Cándida spp. El 90% de los casos la infección asentó sobre válvulas nativas, siendo la válvula aórtica la más frecuentemente afectada en un 60%. El 50% de los casos de EI fueron asociadas a cuidados de la salud. El 42% de los pacientes presentaron complicaciones. La mortalidad fue del 26%.
Conclusiones:
A pesar de las mejoras en métodos diagnósticos, manejo clínico y opciones terapéuticas, la endocarditis continúa presentando una alta mortalidad y sigue asociándose a complicaciones graves. La mitad de los casos analizados en esta serie cumplía criterios de infección asociada a los cuidados de la salud. Los agentes etiológicos predominantes fueron cocos gram positivos, particularmente Staphylococcus, aunque se destaca que el 13% de los casos se debieron a bacilos gram negativos principalmente E. coli, siendo este resultado diferente a lo reportado en la literatura internacional. La posibilidad de contar con datos de epidemiología local nos permite plantear un esquema terapéutico antibiótico empírico ajustado a los rescates microbiológicos.
La presente comunicación permite sugerir considerar el diagnóstico de EI en pacientes con fiebre sin foco y contacto con el sistema de salud.