En esta sesión de #AIDS2024 se presentaron los resultados de estudios de exploran el uso de drogas recreativas para facilitar la actividad sexual.
- El estudio COMET, realizado en Taiwan en población HSH, halló que un 87.2% utilizó metanfetamina en combinación con una o más sustancias en el sexo y un cuarto reportó inyección de cristal. Las consecuencias negativas físicas, psicológicas, sociales y legales de uso de sustancias eran más frecuentes en aquellos que vivían con VIH. Como resultado, se ha incluido el uso sexualizado de sustancias como criterio de inclusión en programas de PrEP y dichos programas han incorporado un componente de atención de salud mental y uso de sustancias.
- La segunda ponencia reportó un estudio piloto cualitativo para construir una definición de Chemsex, destacando que actualmente coexisten una gran diversidad de conceptualizaciones que dificultan la investigación. Se realizaron 4 grupos focales y 10 entrevistas a hombres gays, bisexuales y otros HSH en Bangkok. Se arribó a una definición que identifica 4 dimensiones: intencionalidad (combinar sexo y sustancias para incrementar el placer), sustancias (la metanfetamina está siempre involucrada), tecnología (está facilitada y organizada por plataformas online y apps), y el setting (siempre tiene lugar en entornos privados, como casas, hoteles y saunas).
- La última ponencia presentó The Greenhouse, una clínica que provee tratamiento de salud mental sin costo en Singapur. El 99% de los pacientes presenta antecedentes de trauma. Proponen un modelo socio-ecológico para comprender el fenómeno del chemsex en hombres gays, bisexuales y HSH, con niveles invidual (e.e., sustancias como respuesta de afrontamiento), social (e.g., fácil acceso a sustancias por apps), comunitario (e.g., estigma) e institucional (e.g., leyes punitivas). Las sustancias más utilizadas en chemsex son el alcohol (33.3%) y los poppers (28.3%). Algunas sustancias solo son usadas en contexto sexual, como los poppers, cristal (4.7%), GHB/GBL (4.7%) y medicación para disfunción eréctil (4.6%). Se concluye que es necesario analizar el fenómeno del chemsex teniendo en consideración las características de cada contexto social particular.