Según una revisión publicada en Neural Regeneration Research, la terapia basada en la aplicación de ondas electromagnéticas en el rango del espectro visible (luz roja) y el infrarrojo cercano, llamada fitomodulación, podría ser una alternativa eficaz para bajar la cantidad de crisis convulsivas y generar un efecto protector en personas con epilepsia.
“Las opciones de tratamiento actuales incluyen la terapia con medicamentos, cuyo objetivo es suprimir la actividad neuronal anormal, o la intervención quirúrgica, que implica la extirpación de la región del cerebro que genera la actividad convulsiva. Sin embargo, aproximadamente 30% de los pacientes no responden a los fármacos, mientras que la opción quirúrgica es invasiva y conlleva un riesgo de morbilidad. Por lo tanto, existe la necesidad de desarrollar un tratamiento no farmacológico y no invasivo eficaz para este trastorno, que tenga pocos efectos secundarios”, declararon los autores.
Destacaron que estudios recientes en modelos animales han demostrado que la fotobiomodulación reduce la actividad similar a las convulsiones y mejora la supervivencia neuronal. Además, esta terapia tiene un excelente historial de seguridad, con poca o ninguna evidencia de efectos secundarios, y no es invasiva.