Un estudio realizado por profesionales de Bélgica y de Francia concluyó que la inteligencia artificial aplicada en medicina es competente para elaborar diagnósticos pero carece de discernimiento a la hora de prescribir pruebas y tratamientos.
En la investigación, liderada por por Jérôme Lechien, Ph. D., profesor de la Université de Mons, Bélgica, junto a colegas del CHU Saint-Pierre y el Hospital Foch de París, se comparó la gestión clínica de 45 pacientes que fueron atendidos por patologías frecuentes de medicina general u otorrinolaringología. Así se halló que si bien los diagnósticos realizados por la IA eran correctos, entre 7 y 8 de cada 10 veces las pruebas indicadas y los tratamientos prescriptos eran innecesarios o inadecuados.