Un estudio realizado en más de 477.000 pacientes destacó la importancia de realizar una evaluación oncológica urgente en personas mayores de 60 años con dolor o distención abdominal, incluso si no se observan otros signos clínicos de alerta.
Con datos de Reino Unido y publicado en Plos Medicine, los resultados del estudio indican que “un total de 9.427/425.549 (2,2%) pacientes con dolor abdominal y 1.148/52.321 (2,2%) con distensión abdominal fueron diagnosticados con cáncer dentro de los 12 meses posteriores a la presentación. Para ambos síntomas, tanto en hombres como en mujeres mayores de 60 años, el valor predictivo positivo para el cáncer superó el umbral de riesgo del 3% utilizado por el Instituto Nacional de Excelencia en Salud y Atención del Reino Unido para recomendar la derivación urgente a un especialista en cáncer. Se realizaron análisis de sangre simultáneos en dos tercios de todos los pacientes (64% con dolor abdominal y 70% con hinchazón)”.
Además, el estudio informa que “en pacientes de 30 a 59 años, varias anomalías sanguíneas actualizaron el riesgo de cáncer del paciente por encima del umbral del 3%: por ejemplo, en mujeres de 50 a 59 años con hinchazón abdominal, el riesgo de cáncer previo al análisis de sangre del 1,6% aumentó a: 10% con ferritina elevada, 9% con albúmina baja, 8% con plaquetas elevadas, 6% con marcadores inflamatorios elevados y 4% con anemia. En comparación con la evaluación de riesgos basada únicamente en los síntomas de presentación, la edad y el sexo, por cada 1000 pacientes con distensión abdominal, la evaluación que incorpora información de los resultados de los análisis de sangre daría como resultado 63 derivaciones urgentes adicionales por sospecha de cáncer e identificaría a 3 pacientes con cáncer adicionales a través de esta ruta (un 16% de aumento relativo en el rendimiento del diagnóstico de cáncer)”.