Según sugiere un estudio realizado en más de 50 bebés de hasta dos años de edad en África, Asia, América del Norte y América del Sur, administrar terapia antirretroviral (TAR) a recién nacidos con VIH dentro de los primeros días (en lugar de semanas o meses) de vida puede suprimir de forma segura cantidades de VIH en la sangre hasta niveles indetectables.
Los hallazgos del estudio, a cargo del Centro Infantil Johns Hopkins y patrocinado por los Institutos Nacionales de Salud (NIH) y la Red Internacional de Ensayos Clínicos sobre SIDA Materno, Pediátrico y Adolescente, fueron publicados este mes en la revista The Lancet.