Un estudio liderado por la Universidad de Barcelona y el Instituto de Química Avanzada de Cataluña (IQAC-CSIC) presenta una nueva herramienta terapéutica capaz de inhibir la proliferación del virus SARS-CoV-2, causante de la COVID-19. Los resultados, publicados en Journal of Biological Chemistry, abren nuevas perspectivas en el tratamiento de este coronavirus y otras enfermedades virales sin tratamiento, como la fiebre hemorrágica de Crimea-Congo (CCHFV).
El estudio se centra en las moléculas llamadas Horquillas Polipurínicas Reverse Hoogsteen (PPRH), fragmentos de ADN de cadena sencilla con alta afinidad por secuencias específicas de ARN. Estas moléculas pueden bloquear la replicación del SARS-CoV-2 al unirse a regiones clave de su genoma mediante enlaces de Watson-Crick:
La técnica ha sido validada en modelos animales transgénicos y en células in vitro que expresan el receptor humano ACE2, utilizado por el virus como vía de entrada. Los resultados muestran alta eficacia en ambos casos, destacando el potencial de las PPRH como agentes terapéuticos contra enfermedades virales de origen genético.