Un estudio alemán con 900 pacientes, publicado en Nature Metabolism, reveló que una nueva formulación oral de nicotinamida (una variante de la vitamina B3) acelera la recuperación en personas con COVID-19 leve a moderado y reduce el riesgo de síntomas persistentes.
A diferencia de los comprimidos tradicionales, esta fórmula libera 1000 mg de nicotinamida directamente en el intestino delgado inferior y el colon, donde actúa sobre el microbioma afectado por la infección y cubre el aumento en las necesidades vitamínicas.
En el ensayo aleatorizado y controlado con placebo, el 57,6% de los pacientes tratados con nicotinamida recuperaron su rendimiento físico, frente al 42,6% del grupo placebo. Además, quienes fueron tratados volvieron más rápido a su vida normal y, seis meses después, tenían menos riesgo de sufrir COVID-19 persistente. No se reportaron efectos secundarios significativos.