Introducción:
Candida auris es un patógeno emergente multiresistente, presentándose como un importante agente de candidemia nosocomial y responsable de múltiples brotes en todo el mundo. Se asocia a fracaso terapéutico y a altas tasas de mortalidad. La prevalencia de C. auris es subestimada ya que los métodos de identificación la clasifican erróneamente como C. guilliermondii, C. haemulonii, C. famata o Rhodotorula glutinis. Recientemente, se han registrado brotes por C. auris en Venezuela y Colombia lo que hace necesario el estudio de la sensibilidad a los antifúngicos disponibles y la evaluación de los métodos de identificación para así prevenir y controlar posibles brotes en nuestro país.
Objetivo:
Evaluar la capacidad de los métodos de identificación disponibles en nuestro medio para diferenciar C. auris de otras especies de Candida relacionadas y establecer los perfiles de sensibilidad de esta especie.
Materiales y métodos:
Se analizaron 17 cepas de C. auris aisladas de pacientes con infección fúngica invasora probada (hemocultivo) de un brote en Colombia. Se le realizaron pruebas fenotípicas clásicas (tubo germinativo, clamidoconidios, etc), crecimiento en medios cromogénicos (CHROMagar), pruebas fenotípicas automatizadas (Vitek ®), pruebas genéticas (secuenciación de ITS), identificación por proteómica utilizando equipos y bases de datos distintas (MALDI-TOF Bruker y MALDI-TOF Shimadzu) y pruebas de sensibilidad a antifúngicos. Utilizando el método de microdilución (protocolo CLSI M27A3 y S4), se evaluó la sensibilidad a fluconazol (FLC), itraconazol (ITC), voriconazol (VRC), clotrimazol (CLT), posaconazol (PSC), anidulafungina (ANF), caspofungina (CSF) y anfotericina B (AMB).
Resultados:
Las 17 C. auris fueron identificadas correctamente solo por secuenciación de la región ITS o utilizando MALDI-TOF de Bruker. No presentaron tubo germinativo ni clamidoconidios. En CHROMagar todas la cepas presentaron colonias de color blanco similares a muchas otras especies frecuentes como C. parasilosis. Con Vitek, 8 cepas se identificaron como C. guilliermondii, 8 como C. haeumulonii y una como Rhodotorula spp. El MALDI-TOF de Shimadzu no pudo identificarlas ya que C. auris no está en su base de datos. Los resultados de las pruebas de sensibilidad evidenciaron resistencia a FLC en el 100% de los aislamientos (CIM > 64 µg/ml) y altas medias geométricas (MG) para los otros azoles (ITC: 0,46 µg/ml; CLT: 1,68 µg/ml; VRC: 1,41 µg/ml y PSC: 0,31 µg/ml). La MG de CIMs para AMB y las equinocandinas fueron elevadas (AMB: 0,88 µg/ml; ANF: 1,68 µg/ml y CSF: 2,55 µg/ml). Se observaron CIMs con mayor variabilidad para CSF (0,25 µg/ml – 8 µg/ml) y ANF (0,5 – 8 µg/ml).
Conclusiones:
Podemos recomendar que cuando se identifique una levadura como C. guilliermondii o como C. haeumulonii con altos valores de CIM a FLC y AMB se utilicen métodos moleculares o proteómicos para confirmar que no se trata de C. auris. Esta diferenciación taxonómica es importante ya que el CDC recomienda a las instituciones de salud el aislamiento de pacientes colonizados o infectados por C. auris, mientras que esto no es necesario cuando se trata de otras Candida spp.